PROGRAMAS DE FAMILIAS DAIP
Los programas de familias DAIP (Desarrollo Armónico de la Identidad Personal) responden a la necesidad de educar a nuestros hijos en la total expresión de sus posibilidades personales.
Sólo así serán capaces de cambiar su unidad personal.
La educación que se promueve desde Identitas se distingue por estas tres características:
Integral y armónica
El proceso educativo, para conseguir su mejor eficacia ha de potenciar el crecimiento en todos los constituyentes de la persona y en las distintas dimensiones en la que la persona se manifiesta
Proyectada
La confección de un proyecto educativo familiar y de un Plan personal de mejora para cada hijo da coherencia y sentido a toda la tarea educativa. Permite adelantarse a las situaciones educativas, educando en futuro y de modo preventivo
Positiva
Se avanza mejor y más rápidamente cuando los progresos personales se basan en lo positivo, en los logros, en lo que se hace bien. Así los aprendizajes quedan mejor grabados y se refuerza la autoestima y la seguridad personal
El programa general de cada uno de los programas DAIP se basa en la concepción de persona de Identitas:
Organización de Programas de Familias DAIP en colegios
Los colegios que estén interesados en implantar los Programas de Familias DAIP pueden elegir entre estas tres modalidades:
El Colegio, directamente
Identitas forma a los profesores del Colegio y ellos imparten directamente las sesiones a los padres de sus clases y realizan las entrevistas personales con cada familia, con la periodicidad prevista en el Proyecto Educativo.
Colaboración Identitas-Colegio
a. Se forma a los profesores para que ellos realicen las entrevistas personales con las familias y les enseñen a utilizar las agendas DAIP.
b. Los profesores de Identitas se responsabilizan directamente de las conferencias.
Identitas, directamente
Identitas asume directamente la formación de los grupos DAIP con los padres interesados, una reunión mensual con cada sesión, el foro de la lectura correspondiente y una entrevista personal al trimestre con el Asesor DAIP de Identitas
El Colegio, directamente
Identitas forma a los profesores del Colegio y ellos imparten directamente las sesiones a los padres de sus clases y realizan las entrevistas personales con cada familia, con la periodicidad prevista en el Proyecto Educativo.
Colaboración Identitas-Colegio
a. Se forma a los profesores para que ellos realicen las entrevistas personales con las familias y les enseñen a utilizar las agendas DAIP.
b. Los profesores de Identitas se responsabilizan directamente de las conferencias.
Identitas, directamente
Identitas asume directamente la formación de los grupos DAIP con los padres interesados, una reunión mensual con cada sesión, el foro de la lectura correspondiente y una entrevista personal al trimestre con el Asesor DAIP de Identitas
Materiales de los Programas DAIP
Educar desde Pequeños es un programa de Educación Familiar dirigido a padres con hijos hasta seis años. En esta edad se consolidan los factores básicos de la personalidad de los hijos, que imitan a los padres con afán de poseer las cualidades positivas de sus principales modelos
¿Por qué este programa?
El nacimiento de un hijo supone el mayor acto de creatividad y novedad que puede darse en este mundo. No habrá jamás nadie como él. Es único.
La educación ha de ser, necesariamente, única, personal, propia, con rasgos y características que servirán para conocer y desarrollar lo que sólo él puede ser capaz de expresar y ser. Y esta educación se recibe en primer término y de forma más significativa en la familia. El influjo educativo familiar es decisivo en todo el proceso de maduración personal. Educar es en cierto modo ayudar a crecer a cada hijo.
Crecer es un proceso que se realiza unido al resto de la actividad humana y conlleva una multiplicidad de interacciones. Es importante proporcionar la oportunidad de desarrollar al máximo, cada uno de los constituyentes y dimensiones que conforman la identidad personal de cada uno de los hijos.
Desde el principio ha de crecer en un ambiente muy rico en cariño, reflejo del amor de los padres. Esa es la mejor garantía de un desarrollo armónico, estable y seguro, generador de una sana autoestima con la que enfrentarse a los retos físicos del crecimiento y a las inseguridades propias de todo cambio, para aceptarse como es, confiar en quienes le rodean y quieren, y atreverse a conquistar su propio ámbito de autonomía personal.
Esperar la Pubertad es un programa de Educación Familiar dirigido a padres con hijos entre seis y doce años. Es un buen momento para lograr un aumento de la autoestima o sentimiento positivo propio. Tiene una mayor conciencia de sí mismo y disfruta sintiéndose importante y útil. En esta etapa aprenden a ser más autónomos, ayudan más en casa y consideran a sus padres como modelos a los que quieren imitar
¿Por qué este programa?
De los seis a los doce años aparecen cambios fundamentales en toda la persona caracterizados por una mayor apertura y madurez en todos los órdenes. Tiene una mayor con- ciencia de sí mismo, aunque le encanta estar con sus iguales, jugar y relacionarse. De esta forma se afirma su identidad. Las diferencias evolutivas entre chicos y chicas es cada vez más significativa e invita a fijar las bases de una educación de las sexualidad y el amor en el ambiente más propio que es el de la familia.
Muchos se refieren a esta etapa como la edad escolar, pero también se podría caracterizar como la edad familiar, porque durante este tiempo aprenden a ser más autónomos, ayudan más en casa, “obedecen” con poca resistencia, consideran a sus padres como héroes y modelos a los que quieren imitar, y asimilan con gran rapidez todos los cambios que se van produciendo en su aspecto físico, en su afectividad, en su inteligencia y en el modo de vivir los hábitos y virtudes que le permiten ser más libre, en las relaciones con los demás, en su trabajo escolar y en su trato con Dios. Como sucede siempre en la vida, esta maduración se produce sin pausa y sin “llamar la atención”, pero no es una maduración “automática”, sino que es tanto más sólida y consistente cuanto mayor es la intencionalidad educativa de la familia y del colegio, y más acertado es el proyecto educativo personal de cada hijo.
Sobrevivir a los adolescentes es un programa de Educación Familiar dirigido a padres con hijos entre doce y dieciocho años.
La adolescencia es una edad especialmente importante para educar en futuro. Los adolescentes son conscientes de que son protagonistas de su propia vida y para llevarla a buen término requieren del cariño, la atención y el ejemplo de sus padres
¿Por qué este programa?
La adolescencia es una etapa en la que padres e hijos, profesores y alumnos, viven con una intensidad especial todos los momentos que pasan juntos. Los adolescentes la recuerdan como “ese periodo de la vida en el que los padres están insoportables”; mientras que los padres aún están esperando reponerse del terremoto adolescente de sus hijos: han agotado todos los tranquilizantes de la farmacia.
Los adolescentes viven este periodo con una especial novedad, y no es para menos, porque, efectivamente, estrenan de todo: cuerpo, afectos, inteligencia, relaciones y modo de vivir su libertad. Si los padres y educadores pueden prever esas situaciones, tendrán más oportunidades de acertar en su educación.
Los adolescentes son como unos recién nacidos, muy necesitados de ayuda, y están en una fase de inestabilidad hacia la madurez y responsabilidad, por eso son capaces de grandes ideales y de pequeños comportamientos “infantiles”. Ellos son los primeros en descubrir los cambios que se están operando en su persona, en todas las dimensiones (física, afectiva, intelectiva y volitiva) y en las manifestaciones de la singularidad (sacan a relucir su mismidad), de la apertura (las relaciones con el trabajo y con las personas más cercanas se vuelven más que problemáticas), y de la originación (un trato personal con Dios con altibajos en muchas ocasiones).
Comunicar el amor es un programa dirigido a matrimonios, para ayudarles a superar las dificultades ordinarias de la vida en común y a descubrir que pueden ser más felices cada día
¿Por qué este programa?
El amor es una virtud que puede crecer cada día, si aprende a realizar actos de amor. Muchas personas se quieren pero no saben expresarlo adecuadamente y los mensajes que le mandan a su amor terminan siendo equívocos o desconcertantes. Con este programa aprenderemos a través de dieciséis sesiones a conocernos mejor y a practicar actos de amor que permitan incrementar la felicidad de quien amamos.
Los padres que se quieren mejor generan un ambiente de cariño en casa, necesario para que sus hijos adquieran una personalidad segura, estable y armónica.
Las dieciséis sesiones del Programa Comunicar el Amor se complementan con un libro para trabajar, una película para disfrutar juntos y unos “deberes” para reforzar la complicidad que la intimidad del amor necesita para expresarse confiadamente.